En ingles: http://switchboard.nrdc.org/blogs/rhwang/545_mpg_and_the_rebirth_of_the.html
Hay mucho optimismo en el Auto Show Internacional de Norteamérica en Detroit este año comparado a los de los últimos años. Como escribo en el op-ed para el Detroit Free Press y en mi discurso ante el anual Automotive News Congress, la comunidad ambientalista está comprometida a luchar con todo para que la industria automotriz siga avanzando.
Con ese fin nos hemos unido a 13 fabricantes de autos, el sindicato UAW, defensores de los derechos al consumidor entre otros para apoyar la nueva propuesta del gobierno de Obama que fortalece las normas y procuraría rendimiento que alcanza los 23.17 km/l (54.5 mpg) en 2025.
Esto es lo que las tecnologías que las normas de rendimiento y contaminación propuestas por Obama que alcanzarían los 23.17 km/l generará:
- 300 millones de dólares para la industria automotriz de los Estados Unidos
- 200 millones de dólares regresados a los bolsillos de consumidores, mientras que
- Asegura un liderazgo mundial de Detroit en el siglo XXI sobre innovaciones en automática avanzada
Lamentablemente, todavía hay algunos ideólogos en Washington D.C., especialmente en el Congreso que buscan estancar a los coches limpios.
Mi mensaje de hoy para la industria automotriz es sencillamente: "trabajemos juntos" para construir el mercado para coches limpios, desbastemos nuestra peligrosa dependencia al petróleo y reinvirtamos en el liderazgo de fabricación estadounidense.
He aquí el texto completo de mi discurso y un Power Point sobre este mismo:
TESTIMONIO DE ROLAND HWANG ANTE EL AUTOMOTIVE NEWS CONGRESS
10 de enero 2011
Buenos días. Gracias por tan amable presentación.
Es un placer para mi estar aquí representando a Natural Resources Defense Council.
Hace unos años, me sentía como Daniel en la leonera frente a este público. Pero la verdad es que hemos progresado sobremanera en los últimos años... nos hemos podido poner de acuerdo. Ya no existe aquel abismo enorme entre ecologistas y la industria automotriz.
Aunque es cierto que algunos en la industria tardaron en acariciar la idea de aceptar otras perspectivas... otros han sido muy receptivos. Por mi parte, he intentado escuchar más atentamente y encontrar puntos comunes cuando posible. Hay demasiado en juego para todos los involucrados... la industria automotriz… los compradores de automóviles y, de hecho, el país entero. Tenemos que seguir encontrando maneras de trabajar juntos... y estoy comprometido a lograrlo.
Hoy… abordaré uno de esos temas sobre los cuales se han buscado maneras de llegar a un acuerdo – sin que todos se opongan reflexivamente por ser de otro.
Imagínense que nuestra nación nos ofreciera una alternativa de cómo gastar la mitad de un billón de dólares de nuestra riqueza en las próximas dos décadas.
Una opción sería enviar 350 millones de dólares al Oriente Medio y otros países exportadores de petróleo con el resto dividido entre la creciente industria petrolera.
Otra alternativa sería invertir 300 millones de dólares directamente en la industria automotriz de Estados Unidos, devolver 200 millones de dólares a los bolsillos de los consumidores y crear medio millón de nuevos empleos mientras reducimos la peligrosa contaminación de carbono.
¿Es este un sueño imposible? ¿Será demasiado simplista la propuesta? Difícilmente.
De hecho, acabo de resumir la premisa, en términos generales, del nuevo acuerdo histórico entre el gobierno de Obama, California y los principales fabricantes de automóviles. Negociaron juntos el verano pasado un tratado que procurará coches que, en promedio, rendirán 23.17 km/l (54,5 mpg) en el año 2025, alrededor del doble del promedio de rendimiento de coches actualmente en las carreteras.
La tecnología adicional para cumplir con este objetivo se traducirá en 300 millones de dólares más en ingresos para la industria automotriz de Estados Unidos y garantiza su estatus como líder mundial en la innovación avanzada de vehículos.
Parar el envío de 350 millones de dólares al extranjero fortalece nuestra economía, nos hace menos vulnerables a la crisis de precios del petróleo y crea cientos de miles de puestos de trabajo en EE.UU. Además, la reducción en contaminación de carbono protegerá nuestra economía contra los costosos impactos del cambio climático global en forma de fenómenos meteorológicos extremos, como los huracanes, las olas de calor y las inundaciones.
Afortunadamente, la industria automotriz no tiene por qué esperar hasta el año 2025 para ver los beneficios de las normas más estrictas.
En un mundo donde los precios del combustible son impredecibles, es precisamente la previsibilidad de las normas sustancialmente más dinámicas que han permitido que la industria automotriz ejerza control sobre su propio destino.
Gracias al acuerdo de 2009 para elevar el nivel a 15.09 km/l (35,5 mpg) para 2016, la industria está mucho mejor preparada, más resistente y - aparentemente - próspera dados los altos gastos en gasolina del año pasado. Las ventas, ganancias y rendimiento todos van viento en popa. Y a diferencia de las crisis petroleras anteriores, la participación en el mercado de GM y Ford realmente ha aumentado.
Una meta de 23,17 km/l (54,5 mpg) será la chispa que estimulará la innovación y garantizará el renacimiento de la industria automotriz en EE.UU.
Pero quiero ser claro que... como sabrán… estas innovaciones no van a depender de alguna tecnología "caja negra" imaginaria... se basará en conocimiento existente... en la ciencia... muy aparte de la "ciencia ficción".
Ahora... sé que es poco realista suponer que de la noche a la mañana cada estadounidense manejará del trabajo a casa y lo enchufará para recargarlo… al igual que lo hacen con sus teléfonos celulares.
Las transmisiones eléctricas son, sin duda, el futuro del automóvil. Pero para alcanzar los 23,17 km/l (54,5 mpg), más del 80 por ciento de los vehículos tendrán motores convencionales de gasolina – aunque altamente sofisticados.
El detalle es que ahora algunas de las tecnologías más consecuentes tienen la oportunidad de entrar en juego.
Agregar un simple turbocompresor, inyección directa para motores y cilindros de corte puede ofrecer la misma potencia y un rendimiento fiable mientras quema menos petróleo. Las transmisiones automáticas y de doble embrague, las transmisiones de 8 velocidades automatizadas se desplazan más rápido y permiten que el motor ejecute en su zona de acción por más tiempo. La alta resistencia, los materiales avanzados cercioran que los autos sean seguros y rindan más.
Estas ideas innovadoras ya se despliegan desde el uso limitado en un puñado de modelos… al uso generalizado en las líneas de montaje en las fábricas de autos.
La versión comprimida del motor de gasolina de inyección directa turbo de Ford, llamado el ecoboost, aparece ahora en 4 de cada 10 modelos F-150. Se introdujo apenas el febrero pasado y recientemente sobrepasó los 100.000 en ventas.
¿Cuál es el truco?
Como de costumbre, existen ideólogos en los medios y en Washington D.C. que están más interesados en frustrar todo lo que parezca "verde" que hacer progresar nuestra nación, y se han asociado con comerciantes de autos para intentar preservar el statu quo. Han usado investigaciones costosas y legislación despilfarradora para intentar bloquear la aplicación de las nuevas normas y hacer todo lo posible por hundir este acuerdo histórico, enterrar los beneficios que ofrece y retroceder la nación al estancamiento político en el tema del rendimiento.
Como en años anteriores, aquellos opuestos al necesitado progreso han desempolvado argumentos viejos para convencernos, de alguna manera, que a los estadounidenses no les gusta la idea de ahorrar dinero y conducir mejores coches.
Afortunadamente, los consumidores les llevan la delantera.
Están votando con sus billeteras y marchando en tropel para lograr uno de los coches eficientes de nueva generación tan rápido como salen de las fábricas.
Donde una vez camionetas grandes y V-8 gobernaban la carretera, ahora uno de cada dos vehículos vendidos es un coche pequeño, mediano o crossover. Los autos ahorrativos de 4 cilindros ahora son la opción más popular en EE.UU.
Según truecar.com, al comparar los autos con los del mismo mes del año pasado, el rendimiento de combustible promedio de vehículos nuevos ha aumentado los últimos 15 meses sin parar.
El rendimiento de vehículos nuevos es, por lejos, la única consideración más importante al comprar un coche nuevo para los estadounidenses, con el 45 por ciento de los consumidores llamándolo el factor número uno en su decisión, según una encuesta nacional que comisionó Ford Motor Co. el otoño pasado.
Alcanzar los 23,17 km/l (54,5 mpg) será de provecho para los consumidores, aumentando el número de autos con buen rendimiento. Gracias al acuerdo de 2009, ya casi hay 40 modelos a la venta hoy que pueden esencialmente satisfacer los 15,56 km/l (36,6 mpg), que es el promedio de flota en las normas propuestas para el 2017. Estos modelos vienen desde en coches compactos hasta camionetas, incluyendo el Lacrosse de Buick, la Odissey de Honda y el Focus de Ford.
Los compradores no deben asombrarse si no pagan más por un coche que se adapte a 23,17 km/l (54,5 mpg). Durante la vida del vehículo, ahorran miles de dólares. Pero quizás lo más importante es que los hogares verán ahorros inmediatos en sus cuentas mensuales dado que los ahorros en combustible sobrepasarán los pagos mensuales por el auto de mayor rendimiento.
Mi mensaje hoy es simple: trabajemos juntos.
El último acuerdo para autos limpios nos ofrece una alternativa... elegir entre el estancamiento y el progreso. Imagínate un lapso en el cual los fabricantes de autos, reguladores y ecologistas todos juntos, colaboran para construir mercados para coches limpios de mejor rendimiento, recortan nuestra peligrosa dependencia al petróleo y reinvierten en el liderazgo de fabricación estadounidense.
El último acuerdo para autos limpios reunió diversos aliados en una matriz diversa y sin precedente de apoyo: desde fabricantes de automóviles a ambientalistas, desde Republicanos a Demócratas, desde defensores de consumidores hasta defensores de la seguridad energética, desde líderes de negocios hasta sindicatos.
Esperemos que aquellos que quieren perturbar este programa y regresarnos a los días oscuros de estancamiento político no triunfen... nosotros somos los que elegimos… y la apuesta de la industria automotriz de Estados Unidos es grande teniendo en la balanza… los empleos… y el futuro de nuestra nación.
Espero trabajar con ustedes para mantener el progreso en la dirección adecuada. ¡Gracias!