Sí nos interesa...y mucho

Sí, nos interesa y mucho. Este es el mensaje que los latinos en Estados Unidos enviaron  claramente en los resultados de un encuesta llevada a cabo por Latino Decisions para el Consejo para la Defensa de Recursos Naturales (Natural Resources Defense Council). Una gran mayoría de los latinos en Estados Unidos queremos que el gobierno luche contra el cambio climático. Nos preocupamos porque sabemos que  la amenaza ambiental de nuestros tiempos. Nos preocupamos porque amenaza a nuestras familias y a nuestras comunidades. Queremos que el país adopte medidas contra los peligros que estamos enfrentando por esta creciente amenaza.

Esta encuesta destaca dramáticamente resultados parecidos a los que hemos visto en encuestas anteriores. El apoyo es definitivo. De hecho, nueve de cada diez latinos quieren que se combata el cambio climático.

Este apoyo cruza las líneas partidarias también dado que el 68 por ciento de latinos republicanos consideran extremamente importante que nuestro gobierno aborde el problema del cambio climático y el calentamiento global. Un 87% de latinos del partido independiente concuerdan con este punto de vista, mientras que un 97 por ciento de los latinos demócratas coinciden también.

El apoyo es aún mayor en cuanto a la  contaminación del aire que respiramos. Un 92 por ciento de latinos republicanos creen que es importante que el gobierno aborde la contaminación del aire. Entre los independientes, el apoyo es del 98 por ciento, mientras que todos los demócratas concuerdan con este punto de vista casi un 100%.

Según Latino Decisions, la empresa que realizó la encuesta, la intensidad del apoyo de los latinos por acción climática y las protecciones ambientales se compara solo al nivel de apoyo por la reforma migratoria. Sin embargo, los líderes políticos no han empezado a hablarles a los Latinos sobre la contaminación de carbono, el agua y el aire limpio. Siguen perdiendo una oportunidad valiosa de decirnos lo que están haciendo para afrontar estos problemas y les queremos comunicar que queremos saber y nos preocupa.

Hemos visto este apoyo entre los latinos reflejado en medidas ambientales anteriormente. En noviembre de 2006, en California, el voto latino con el 84 por ciento de apoyo ayudó a lograr la victoria de la propuesta de ley 84 que procuró bonos para el agua y los parques. Asimismo, en el 2010, las encuestas tras las votaciones indicaron que las zonas con altos porcentajes de votantes latinos se opusieron fuertemente a la proposición 23 contribuyendo a su derrota.  Esta propuesta habría anulado la histórica ley climática AB32 y con ella la emergente economía de la energía limpia.

Hemos demostrado una y otra vez que el tema nos preocupa y queremos que se nos tome en cuenta.

Los hispanos pronto se convertirán en el grupo étnico dominante en el estado más populoso del país, California. En el 2012, doce millones de hispanos votaron en las elecciones presidenciales (10 por ciento del electorado estadounidense) y se espera que esta cifra se duplique y alcance el 20 por ciento en 2030.

Esta encuesta, importantemente, analizó por qué detrás de este apoyo y notó que los temas que sobresalieron fueron aquellos mensajes que aspiran a una vida mejor como dejar un mundo mejor, más limpio y saludable para la próxima generación. El 90% de los latinos están convencidos que tenemos un deber de actuar ahora para proteger el bienestar de la próxima generación para que nuestros hijos y nietos tengan comunidades seguras y limpias y un planeta más sano. Las preocupaciones sobre los efectos a la salud debido a los impactos del cambio climático son también fuertes motivadores.

Las consideraciones económicas y religiosas no se acercan al nivel de estas otras preocupaciones. Quizás esto se debe a que muchos Latinos aún sienten que a pesar de sus retos, nuestra comunidad está aún podrá lograr el sueño americano.

Una encuesta de Fox News de septiembre de 2012 encontró que los latinos creen que la próxima generación de latinos en los EE. UU. correrán mejor suerte. Una encuesta reciente por la Robert Wood Johnson Foundation y la Harvard School of Public Health hace eco a esa encuesta revelando que, “cuando se le pregunta a los padres latinos con niños menores de 18 años sobre el futuro de sus hijos, la mayoría demuestra optimismo sobre las oportunidades que sus hijos tendrán y, a pesar de tener diversos problemas y preocupaciones, la mayoría de latinos informan tener altos niveles de satisfacción con sus vidas en general.”

Muchos de nosotros y nuestros padres vinieron a este país porque creíamos que este es el país de la oportunidad, y esto sigue siendo cierto para la mayoría de los latinos. Como tal, aún creemos que aquí, todo es posible. Desde este punto de vista, es fácil entender que estaríamos más dispuestos a apoyar a aquellos líderes que nos quieren ayudar a lograr ese sueño a través de trabajos de energía limpia, límites a las emisiones de carbón y el aire saludable. Y sin embargo, los políticos siguen ignorando la oportunidad de cultivar conciencia y apoyo. Es hora de empezar a hablar de las posibilidades y a movilizar a las personas que creen que podemos lograrlo.

Esta conversación también requerirá que reconozcamos que mientras que el mensaje tradicional de la comunidad ambientalista del individuo solitario escalando una montaña puede que resuene con las tendencias individualistas de algunos, para nosotros los latinos el mensaje debe enfocarse en el aspecto global de los problemas ambientales como lo demuestra esta encuesta. La tierra, el agua y los recursos naturales de los Estados Unidos y de nuestros países natales son todos elementos conectados bajo nuestro sentido nato de comunidad.

Este sentido personal de una profunda interconexión mundial no solo a nuestras propias familias con quienes cenamos juntos todas las noches, pero por nuestra red familiar más amplia que incluye a nuestros primos, tíos y abuelos que viven aquí  o en el extranjero y eso se refleja en esta encuesta que revela que cuidar de la familia aquí y en el mundo son motivadores poderosos para abordar el problema climático. Este sentido de deber familiar al igual que las preocupaciones por nuestros compatriotas y familiares en el extranjero quienes puede que no tengan las herramientas necesarias para lidiar con los impactos climáticos, también se refleja en estos resultados.

Los latinos reconocemos y visceralmente sentimos la interconexión de la herencia que compartimos con nuestros vecinos en el extranjero.  Por eso es natural, por motivo de esta hermandad global, que los latinos consideremos los impactos del cambio climático a nivel global.  Cuando se les preguntó si pensaban sobre estas preocupaciones a causa propia, de sus familias, sus comunidades, el país, el mundo entero, o algo más, la respuesta más común fue que se preocupaban por el “mundo entero.”  Los lazos transnacionales que compartimos los latinos con sus familias y tierras ancestrales ayudan a explicar esta perspectiva global. De hecho, el 63 por ciento se expresaron “algo a muy preocupados” sobre los problemas ambientales que enfrentan sus familiares en el extranjero.

Tal vez aún no ha llegado el momento donde veamos a miles de latinos marchando sobre el medio ambiente, aquellos que ignoran estos resultados lo hacen a su propio costo. Los latinos están hablando en voz alta y clara: ya es hora de que hablen con nosotros y nos muestren lo que piensan hacer para disminuir la contaminación de carbono que nos está llevando hacia el caos climático, dañando nuestras comunidades y amenazando el futuro y salud de nuestros hijos.

Sabemos que en nuestro país lo podemos lograr.