Eficiencia energética: Un pilar del futuro energético de Chile (Parte I)

Hace algunos días escribí un blog acerca de cómo las energías renovables no convencionales en Chile están en auge y desempeñarán un papel clave en el futuro de la matriz energética del país. Otro sector de energía limpia que a menudo se pasa por alto – pero que no es menos merecedor de atención en el papel que pueda desempeñar para ayudar a satisfacer las futuras necesidades energéticas chilenas – es la eficiencia energética. De hecho, dado que la eficiencia energética es generalmente considerada como la forma más rápida y más económica de "generar" la energía, es sorprendente que no es el foco de atención con más frecuencia en Chile, donde regularmente la industria y los políticos insisten en la necesidad de construir nuevas plantas de generación para suministrar la demanda de un sector minero sediento de energía. Si el nuevo gobierno fuera a realizar algunos cambios fundamentales en la forma en que aborda la eficiencia energética, este sector podría contribuir de manera rápida y de forma demostrable a la cartera energética nacional - y, en mi opinión, ganarse un poco más del respeto que el recurso se merece.

Para clarificar, el gobierno de Chile sí ha reconocido el importante papel que la eficiencia energética pueda desempeñar. Fue el primera pilar de la Estrategia Nacional de Energía 2012-2030  del ex-presidente Piñera, y su administración estableció la meta nacional de reducir el proyectado consumo de energía de Chile en 2020 por un 12 por ciento – una meta que se destacó en el Plan de Acción de Eficiencia Energética 2020. El nuevo ministro de energía, Máximo Pacheco, subrayó el compromiso de la Presidenta Bachelet de aumentar la eficiencia energética cuando él la listó como uno de los cinco pilares de la agenda energética de esta administración.

El jefe de la Agencia Chilena de Eficiencia Energética (AChEE, una agencia pública-privada) habló recientemente acerca de los éxitos de la agencia desde que se formó hace tres años, citando por ejemplo los programas en los sectores de transporte y construcción. También dijo que: “tenemos una matriz cara, contaminante e insegura, por eso es que queremos transformarla en una matriz económica, sustentable y segura y ahí creemos que la eficiencia energética es el mejor vehículo para poder lograrlo.”

Hay algunos pasos fundamentales que podrían ayudar lanzar este ‘vehículo’ y elevar el sector de eficiencia energética de un nivel bueno a uno excelente. No es suficiente sólo decir que la eficiencia energética es una pieza importante del rompecabezas de la energía. Las acciones son las que demuestran que la eficiencia energética es una verdadera prioridad. En términos generales, el gobierno podría lograr esto con los siguientes pasos:

  • Crear un marco de eficiencia energética que incorpora y coordina de una manera estratégica los esfuerzos de eficiencia energética actuales y futuros en todos los sectores (incluyendo por ejemplo el transporte, la vivienda y la construcción, los procesos industriales, electrodomésticos, etc.). Un marco como éste, una vez establecido, debe existir indefinidamente – es decir independiente de cualquier cambio de administración.
  • Dedicar fondos estables y suficientes para estos esfuerzos coordinados de eficiencia energética cuales, de nuevo, serían independiente de los cambios de administración.
  • Iniciar un departamento gubernamental con suficiente personal para desarrollar, mantener y analizar indicadores de eficiencia energética y para hacer accesible al público esta información.
  • Establecer un sistema mediante el cual todos las partes interesados ​​puedan participar en la recogida de datos energéticos y la fijación de metas, para que estas metas sean entendidas y confiables.

Estas acciones ayudarían a crear un sector de eficiencia energética que es fuerte, estratégico, informado e incluyente. Ellos se asegurarían que el gobierno tenga los mejores datos disponibles y que pueda tomar decisiones y acciones con la confianza de que puede respaldarlos con recursos financieros y humanos. Por último, mediante la inclusión de la participación de partes interesadas ​​en estos procesos, estas acciones asegurarían la transparencia y la rendición de cuentas a todo el marco.

Hay otras acciones de eficiencia energética para sectores específicos que también podrían contribuir significativamente a ayudar a que Chile pueda satisfacer sus futuras necesidades energéticas. Para ser breve, sin embargo, me referiré a esas acciones en un próximo blog.

Todas estas ideas provienen de un próximo informe de NRDC sobre recomendaciones de políticas de eficiencia energética para el país: De bueno a excelente: El próximos paso en eficiencia energética de Chile, que hemos desarrollado en colaboración con expertos chilenos e internacionales.

Manténgase al tanto con esta página para el próximo blog.