La Secretaría de Energía publica mejores normas de eficiencia de combustible para los vehículos del gobierno federal de México

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Este blog fue escrito por Sam Hoyle, pasante con el Proyecto de Latinoamérica de NRDC.

La Secretaría de Energía recientemente publicó nuevos lineamientos oficiales de eficiencia energética para todas las ramas de la Administración Pública Federal en el Diario Oficial de la Nación. Aunque parezca un paso menor, estos lineamientos requieren que el gobierno federal siga varios estándares diferentes que establecen el uso de lámparas fluorescentes y aire acondicionadoras más eficientes en inmuebles, priorizan el alquilar y construir oficinas públicas más eficientes en incluso recomiendan el uso de aparatos que consumen menos energía. El logro más importante, sin embargo, de estos lineamientos es el requisito de normas de eficiencia de combustible mejores para la flota vehicular del gobierno federal. Los lineamientos son un paso importante que ayuda a reforzar las normas de ahorro promedio en el uso de combustible aprobadas en 2013, a reducir el consumo de petróleo, y por último, a reducir emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otras emisiones que son dañosas a la salud pública y al medio ambiente.

Lineamientos de eficiencia energética son publicados de acuerdo con la Ley Para Aprovechamiento Sustentable de Energía que fue aprobada en 2008. Usando datos de todas las entidades del gobierno, la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía crea lineamientos realísticos y obligatorios con la meta de mejorar la eficiencia en todo el gobierno federal. En la práctica, estos lineamientos no han cambiado mucho desde que fueron emitidos por primera vez en 2010. Por ejemplo, entre 2010 y 2012 los lineamientos para normas de ahorro promedio de combustible solamente cambiaron un poquito y únicamente en las categorías de camiones ligeros y pesados, las cuales también fueron ajustadas para incluir camiones aún más pesadas. Pero este año, se incrementaron las normas de ahorro de combustible para los cinco tipos de vehículos usados por el gobierno: subcompactos, compactos, uso múltiples, camiones ligeros, y camiones más pesados. En particular, se dieron incrementos considerables para compactos, vehículos de cargo y transporte uso múltiple, y camiones más pesados que representan mejoras de eficiencia importantes y señales fuertes del gobierno federal.

Junto con reducir los costos de petróleo para el gobierno, estos cambios refuerzan las normas de eficiencia de combustible de 2013 que fueron las primeras emitidos en México y toda América Latina. La lineamiento actualizado para vehículos compactos nuevos o alquilados (14.39km/l) casi se armoniza con la norma para la flota nacional promedia de 14.9km/l (35 millas por galón o mpg), la cual es vigente hasta 2016. Para un país como México donde el sector de transporte representa el mayor consumo final de energía y donde la mayoría de los productos de petróleo refinados son importados, estas normas son un paso clave para conseguir la independencia energética y cumplir con las metas de mitigación del cambio climático. Para ponerlo en contexto, el Instituto para la Política de Transporte y Desarrollo (ITDP) estima que la flota vehicular crece en un promedio de 6.32 por ciento anualmente, lo cual significa que podrían haber 70 millones de vehículos en la carretera en 2030. El controlar el consumo de petróleo y las emisiones de este sector creciente debe llegar a ser una prioridad nacional y con estos lineamientos, el gobierno federal está mostrando su compromiso con esta meta.

Las normas de 2013 son equivalentes a la meta de 2016 de 34.1mpg (o 14.5km/l) implementada por la Administración Nacional de Seguridad de Trafico de las Carreteras (en inglés National Highway Traffic Safety Administration o NHTSA) de los Estados Unidos. Pero todavía se quedan atrás de las mejores prácticas en normas de eficiencia de combustible establecidas por la Unión Europea (equivalente a 18km/l para 2015) y Japón (20km/l para 2015). No obstante, los nuevos lineamientos demuestran que el gobierno quiere seguir sus propias reglas. También señalan un deseo de fomentar mejor implementación y ejecución de las normas de 2013, algo que ha sido insuficiente hasta ahora. Es especialmente importante porque estas normas expiran en 2017, y el gobierno federal debería estar trabajando para establecer normas de eficiencia de combustible más altas para el periodo entre 2017 y 2025. Si las normas de 2013 son implementados correctamente, reducirán las emisiones de CO2 por 170 megatones y recortarán el alto costo de las importaciones de gasolina que llegó a US$14 mil millones en 2014 (según SENER). Estas deben ser incentivos muy fuertes para que México asegure que la política de adquisición del gobierno federal apoye, y es más, empuje normas de eficiencia de combustible nacionales fuertes.