México anuncia nuevo compromiso para reducir emisiones de calentamiento global - ejemplo que Latinoamérica es parte de la solución
La semana pasada, México anunció un nuevo compromiso de mitigación de gases de efecto invernadero (GEI) para el periodo 2020-2030. Con este anuncio histórico, México se convirtió en el primer país en vías de desarrollo y la primera economía emergente en responder a la Llamada de Lima a la Acción Climática - el acuerdo global mediante el cual se acordó que ha llegado el momento para que todos los países tomen acción para enfrentar al cambio climático. La comunicación de su "Contribución Prevista Determinada a Nivel Nacional" (INDC, por sus siglas en inglés), fue un ejemplo más del liderazgo climático que México ha demostrado a nivel internacional y de que Latinoamérica es parte de la solución climática.
¿Qué está incluido en el compromiso?
El documento completo está disponible en este enlace y a continuación algunos puntos importantes:
- Por primera vez en la historia México estableció un objetivo no condicionado de reducción de emisiones. Para el año 2030, México reducirá sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en un 22% con respecto a una línea base business as usual, es decir el crecimiento tendencial. Por separado, para el mismo año, reducirá en un 51% las emisiones de carbono negro (el segundo contaminante climático más poderoso después del dióxido de carbón). En conjunto, esto representa una reducción total de un 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero y compuestos del país.
- Bajo este plan, México espera que sus emisiones netas alcanzarán un pico máximo en el año 2026.
- La reducción total de GEI y compuestos podría aumentar hasta un 40% si se alcanza un acuerdo global que aborde cuestiones claves como la fijación de precios del carbono, la cooperación técnica y el acceso a los recursos financieros y tecnológicos.
- Se reducirán las emisiones en los sectores de energía, industria, agricultura, residuos, y uso de suelo y silvicultura. El año de referencia para la línea base es el 2013.
- El nuevo compromiso de México también incluye un componente de adaptación al cambio climático para aumentar la resiliencia de la infraestructura y los ecosistemas - un elemento importante para un país tan altamente vulnerable a los impactos del cambio climático como lo es México. Bajo la INDC de adaptación, México trabajará para fortalecer la capacidad de adaptación de al menos el 50% de los municipios más vulnerables a través de sistemas de alerta temprana y de gestión de riesgos, y buscará reducir la tasa de deforestación a 0% en 2030
Liderazgo latinoamericano ante una amenaza global
El compromiso de México es un paso positivo y debe alentar a otros países en Latinoamérica y el mundo a seguir el ejemplo y anunciar sus propias acciones climáticas de manera oportuna. Como la Presidente de NRDC Rhea Suh señala:
"México ha realizado un ambicioso e importante compromiso en la lucha contra el calentamiento global. Su compromiso de hacer recortes significativos en la contaminación de carbono envía una señal que ayudará a asegurar un acuerdo en París este año para proteger el clima global. Estamos seguros de que México puede cumplir o superar estos objetivos y esperamos poder ayudar a México a cumplir con su potencial en energía limpia".
Cabe destacar que esta no es la primera vez que México demuestra que el país está dispuesto a tomar medidas para hacer frente al cambio climático. En 2012, México se convirtió en el primer país en vías de desarrollo en aprobar una Ley General de Cambio Climático, posicionándose como un líder progresista en la región y el mundo. La ley establece un objetivo de generación con energía limpia de 35% en 2024 y una meta para toda la economía de reducir las emisiones de GEI en un 30% al 2020 y 50% al 2050. Más recientemente México aprobó un impuesto sobre el carbono de aproximadamente US$ 3.5 / tCO2e que se aplica a los combustibles fósiles en función de su contenido de carbono (excluyendo al gas natural).
Otros países en la región también han dado ejemplos positivos, manifestando que pueden y deben formar parte de la solución climática. Durante las negociones climáticas en Lima en diciembre 2014, Perú y Colombia se unieron a México y a Panamá en anunciar aportaciones voluntarias al Fondo Verde para el Clima. Ocho países de la región se han comprometido a restaurar 20 millones de hectáreas de bosques degradados para el año 2020. Chile está demostrando su liderazgo en materia de energía renovable con tasas de crecimiento que indican que la meta de lograr en 2025 una matriz eléctrica basada en 20% de energías renovables no convencionales, se podría adelantar hasta en cinco años.
¿Qué sigue ahora? Es necesario reflejar compromisos climáticos en política energética
Al presentar su INDC durante el primer trimestre del año, México demostró una vez más que está dispuesto a ser un líder en acción climática internacional. Ahora será fundamental que este nuevo compromiso internacional se refleje en acciones reales y políticas apropiadas a nivel nacional - sobre todo en el sector energético. Cabe destacar que para el sector energético, el documento INDC sólo identifica las fuentes de las emisiones (combustión de combustible y las emisiones fugitivas de combustibles), sin trazar un plan de ruta claro y concreto sobre cómo México logrará una transición en su matriz energética con el fin de reducir la dependencia de los combustibles fósiles - tanto para el transporte y generación de electricidad. Esta omisión es decepcionante y el INDC se fortalecerá con mayor detalle.
En particular hace falta mayor claridad sobre cómo México impulsará la generación de electricidad con fuentes de energía renovable. En un país dotado de abundantes fuentes de energía solar, eólica, geotérmica, etc. esto debe ser un componente clave en la creación de una matriz energética más limpia. México está viviendo una reforma histórica de su sector energético que brinda una oportunidad singular para dirigir mayor inversión hacía el sector de energía renovable. Sin embargo la reforma se ha enfocado principalmente en el sector de combustibles fósiles. Todavía no queda claro cómo afectará el nuevo mercado energético al sector renovable. Es necesario que los compromisos climáticos internacionales de México se reflejen en el marco político del sector energético para asegurar una mayor integración de fuentes energéticas renovables.
Oportunidades para colaboración bilateral
La buena noticia es que al presentar este ambicioso compromiso en los primeros meses del año, México ahora puede centrarse en trabajar con la sociedad civil y otros actores interesados de manera colaborativa y transparente para crear la ruta crítica que se necesita para cumplir con los compromisos de reducción de emisiones. Al mismo tiempo seguirá siendo importante asegurar la protección de los ecosistemas del país y que las comunidades locales tengan una verdadera voz en las decisiones que les impactan.
El mismo día que México presentó su nuevo compromiso de acción climática, también anunció en conjunto con Estados Unidos la creación de un nuevo grupo de trabajo bilateral de alto nivel sobre energía limpia y cambio climático. Mediante esta nueva iniciativa los dos países trabajarán para armonizar sus políticas en materia de energía limpia, modernización de la red de transmisión eléctrica, estándares para electrodomésticos, eficiencia energética y eficiencia vehicular. Este nuevo esfuerzo es una oportunidad de profundizar aún más la importante relación bilateral entre los países y demostrar que juntos somos más grandes que la suma de nuestras partes.