Las 3 razones por las cuales debes marchar por el clima este mes

Este 29 de abril, se reunirán comunidades de cada rincón del país para unirse a la Marcha del Pueblo por el Clima. Nos enfrentamos a un nuevo gobierno que pone en duda la existencia del cambio climático y cuestiona la evidencia científica que demuestra los impactos que este fenómeno tiene en nuestras vidas. Por eso, es más importante que nunca que el pueblo haga sentir su voz. Soy latina nacida en Colombia y criada en Florida y el impacto que el cambio climático tiene en mi comunidad y en la vida de mis seres queridos es grave y evidente. Yo ya he visto y vivido los impactos del cambio climático en mi propio barrio en Miami una y otra vez. Constantemente calles en Miami Beach se inundan a causa del aumento del nivel der mar, ocasionando perdida completa de automóviles y hogares. Mi familia, que aún vive en Miami, no logra conseguir seguro contra inundación a un precio asequible porque las compañías de seguro se reúsan asegurar propiedades de alto riesgo. Para el año 2100 se estima que unos 13 millones de estadunidenses vivirán en regiones a lo largo de las costas supremamente vulnerables a los efectos del cambio climático, igual que mi familia.

Yo marcho este mes porque no es hora de callar, es hora de actuar y dejar que nuestras voces sean escuchadas por la nueva administración y el nuevo congreso, así como por la comunidad empresarial y los líderes mundiales. Con orgullo voy a participar en la Marcha del Pueblo por el Clima en Washington D.C. A continuación, les diré por qué.

1. Creo en la importancia de la ciencia

Desafortunadamente, la administración del Presidente Trump se ha acostumbrado a usar a su conveniencia una táctica política que cuestiona la comunidad científica y la evidencia que señala las causas y los efectos del cambio climático. El cambio climático no es punto de desacuerdo, es un debate que hace mucho tiempo se resolvió. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) dijo en su más reciente informe que "la influencia humana en el sistema climático es clara, y las emisiones antropogénicas recientes de gases de efecto invernadero son las más altas de la historia. Los cambios climáticos recientes han tenido impactos generalizados en los sistemas humanos y naturales." El informe también advierte que "cuanto más esperemos a actuar, mayores serán los costos y desafíos tecnológicos, económicos, sociales e institucionales que enfrentaremos." La ciencia no miente y tenemos la responsabilidad de escuchar los avisos de la comunidad científica y actuar. A pesar de esto, el nuevo administrador de la Agencia del Protección del Medio Ambiente (EPA), Scott Pruitt, ha dicho que no cree en el cambio climático y ha comenzado a desmantelar el progreso hecho contra el cambio climático.

La inacción de la nueva administración ante la evidencia científica es inaceptable y por eso, voy a marchar este mes en la Marcha del Pueblo por el Clima. La comunidad científica también está organizando una marcha este mes para realzar la importancia de la ciencia.

2. Quiero proteger a nuestra Madre Tierra

Igual de importante para mí que apoyar la comunidad científica es proteger a nuestra Madre Tierra. Una y otra vez la humanidad ha puesto por encima del bienestar de la tierra, el interés corporativo y la avaricia del ser humano. Es insensato que, aunque dependamos tanto de nuestra Madre Tierra para vivir, comer y recrearnos, la explotemos y descuidemos. En este momento, los cambios extremos en temperaturas causadas por el cambio climático ponen algunas poblaciones de animales en peligro de extinción. Por ejemplo, en los trópicos 47 porciento de especies locales han visto un disminuyo serio en poblaciones de animales. También, más del 90 por ciento de la Gran Barrera de Coral se está descolorando y podría morir debido al incremento de la temperatura del mar. La Amazonia, uno de los lugares del mundo con mayor diversidad biológica y una fuente importante para la captura de carbono conocida como "los pulmones de la tierra" está siendo talada a un ritmo alarmante. Los científicos han dicho que la deforestación de la Amazonia está tras el deslave en Colombia que este mes destruyo la ciudad de Mocoa y mató a más de 250 personas. Además, el aumento en las emisiones de CO2 puede estar contribuyendo al colapso de las colonias de abejas, que son las principales polinizadoras. La desaparición de las abejas tendría consecuencias graves para nuestras fuentes alimenticias y el sector agrícola. Aún más desalentador, las capas de hielo del Antártida y Groenlandia se están derritiendo al mayor ritmo registrado en la historia y el mes pasado alcanzaron un nuevo mínimo histórico de 14,4 millones de kilómetros cuadrados. El derretimiento de las capas podría causar inundaciones catastróficas para el mundo.

El ecosistema de la tierra es más frágil y delicada de lo que pensamos y los recursos naturales de los cuales dependemos son limitados. También marcho este mes porque es nuestra responsabilidad cuidar de nuestra Madre Tierra y ser buenos administradores del medio ambiente.

3. Quiero justicia para mi pueblo y mi familia

Si aún no se animan a unirse a esta marcha, esta última razón debe de ser motivo suficiente para participar. La Marcha del Pueblo por el Clima no es solo para abordar los crecientes riesgos producidos por el cambio climático, es también una marcha por la justicia. La presidencia de Donald Trump es una amenaza para el futuro de nuestro planeta, la seguridad de nuestras comunidades y la salud de nuestras familias. El propósito de la marcha es unirnos como comunidad y demostrarle a la nueva administración que vamos a resistir a los ataques contra nuestra gente, nuestras comunidades y nuestro planeta. Sabemos que el cambio climático constituye una amenaza para nuestra salud y seguridad. Miles de personas y niños están en riesgo de enfermedades cardiopulmonares, enfermedades ocasionadas por los alimentos y mosquitos, insolación, y muerta prematura a causa de altas temperaturas y contaminación atmosférica. En particular, los latinos, los afroamericanos y las comunidades de bajos ingresos sufren desproporcionadamente los impactos ambientales. Entre los latinos, por ejemplo, las tasas de asma son más altas y el riesgo de cáncer es mayor por la exposición continua a la contaminación producida por el carbono y la extracción y el uso de los combustibles fósiles (los mayores contribuyentes al cambio climático). Esta disparidad es cuestión de justicia. No podemos permitir que los políticos ignoren nuestros derechos y echen a un lado el bienestar de nuestras comunidades. Nuestros hijos merecen heredar un mundo donde el aire limpio, acceso al agua potable, y comunidades seguras son derechos para todos. Por esto y mucho más voy a marchar este mes.

Los invito a que se unan a NRDC y a miles de otros en la Marcha del Pueblo por el Clima este 29 de abril para demostrarle al mundo y a nuestros líderes que no vamos a tolerar la inacción contra el cambio climático y la injusticia social. Si no estás en Washington, DC el día 29 puedes encontrar una marcha en tu ciudad y mayor información aquí. También puedes unirte a la comunidad científica en la Marcha por la Ciencia el 22 de abril. Puedes encontrar mayor información sobre esa marcha aquí.